La tecnología avanza a la velocidad de la luz y la capacidad de liderar equipos remotos se ha convertido en una habilidad esencial para cualquier líder de proyectos. La pandemia no solo aceleró la transición al trabajo remoto, sino que también desafió a los líderes a encontrar nuevas formas de mantener la cohesión y la productividad de sus equipos, quienes hoy en día se encuentran dispersos por todo el mundo.
Bajo este contexto, liderar un equipo remoto exitosamente no solo es una necesidad, sino que también una ventaja competitiva que puede definir el éxito de un proyecto.
En el siguiente artículo exploraremos 5 prácticas esenciales que te permitirán maximizar la productividad de tus equipos virtuales y adaptarte exitosamente a este nuevo paradigma.
¿Qué son los equipos de trabajo remoto?
Los equipos de trabajo remoto son un grupo de persona que en su rol de empleados internos o externos colaboran para un mismo proyecto desde diferentes ubicaciones geográficas.
Basta que al menos uno de los miembros del equipo se encuentre en una ubicación diferente al resto para hablar de equipos de trabajo remoto.
¿Qué desafíos enfrentan los equipos de trabajo remoto?
Según el último estudio de FindStack los principales desafíos del trabajo remoto estos últimos años han sido:
- Desconectarse después del trabajo (22%): No tener espacios diferenciados para el día a día y lo laboral dificultan la desconexión posterior al horarios laboral.
- La soledad (19%): Las relaciones profesionales entre los equipos de trabajo remotos dejan poco o ningún espacio para la interacción cara a cara, o más aún, para la interacción sobre temas extralaborales con otros colegas de trabajo. Esto dificulta, en algunos casos, desarrollar y consolidar conexiones que puedan servir para enriquecer la experiencia laboral y social.
- Problemas de comunicación (17%): No establecer formas claras de comunicación en equipos de trabajo remoto dificulta mucho la fluidez de la comunicación en este tipo de equipos, sumado a la diferencia horaria que muchas veces enfrentan los integrantes hacen de la comunicación algo poco fluido dificultando el avance y retrasando los proyectos.
A pesar de esto, según una encuesta realizada por Zoom, el 77% de los trabajadores de la Generación Z y el 75% de los millennials consideran cambiar de empleo si se les exige trabajar en la oficina a tiempo completo, por lo que sigue siendo una tendencia si del futuro del trabajo hablamos. Es por estos que prepararnos y adoptar las mejores prácticas para una gestión de equipos remotos efectiva y eficaz nos será altamente favorable para la gestión de nuestros proyectos.
5 Prácticas recomendadas para liderar equipos remotos
- Establecer una comunicación clara y constante. Para cualquier equipo de trabajo, la comunicación es fundamental. Pero lo es aún más para equipos de trabajo remoto. Los líderes deben garantizar un flujo continuo de información, por lo que es necesario diferenciar entre comunicación asíncrona y síncrona. La comunicación asíncrona, que permite a los participantes responder en momentos distintos, puede gestionarse a través de canales como por ejemplo email o Trello. Por otro lado, la comunicación síncrona, que ocurre en tiempo real, se puede manejar mediante herramientas como Slack, Microsoft Teams o Zoom. Además, es esencial considerar las diferencias horarias entre los miembros del equipo para planificar adecuadamente los horarios de comunicación síncrona y establecer protocolos para emergencias fuera de estos horarios.
- Establece acuerdos de equipo Definir acuerdos de equipo en un entorno de trabajo remoto es crucial para establecer expectativas claras, mejorar la comunicación y fomentar la responsabilidad entre los miembros del equipo. Estos acuerdos proporcionan un marco estructurado que ayuda a reducir malentendidos y conflictos, asegurando que todos los participantes comprendan sus roles y responsabilidades. Además, al promover prácticas para mejorar la cohesión y la moral, como reuniones regulares de retroalimentación y actividades de team building, se crea un sentido de pertenencia y conexión, incluso a distancia. Según estudios, la comunicación clara y la responsabilidad son fundamentales para el éxito de los equipos remotos, y establecer normas y acuerdos operativos puede marcar una gran diferencia en su productividad y satisfacción general.
- Fomentar la colaboración y el trabajo en equipo Fomentar la colaboración y el trabajo en equipo ayudará a mantener equipo más motivados y comprometidos. Algunas herramientas que podrían ayudarte a fomentarlo son:
- Incorporación de herramientas de planificación conjunta y seguimiento de tareas en línea.
- Brindar oportunidades de retroalimentación 1-1 y del equipo, en el cual se puedan ir mejorando, manteniendo o eliminando prácticas en pos del buen funcionamiento del equipo.
- Proporcionar las herramientas necesarias para el trabajo remoto Para garantizar una comunicación efectiva y gestión adecuada de un equipo que trabaja remoto, entregar las herramientas necesarias para que puedan desarrollar su trabajo de la mejor manera es indispensable. Estas herramientas incluyen:
- Cámara web y micrófono: equipos esenciales para video conferencias. Tener equipos de calidad mejora las reuniones virtuales y la colaboración en tiempo real.
- Monitor(es): los cuales pueden ayudar a la productividad permitiendo a tus colaboradores gestionar tareas o documentos de forma simultanea.
- Licencias de software o herramientas corporativas: Acceso a software especializado y herramientas corporativas es crucial para el trabajo remoto. Esto incluye suites de oficina (como Microsoft Office 365 o Google Workspace), herramientas de gestión de proyectos (como Trello o Asana) y plataformas de comunicación (como Slack o Microsoft Teams).
- Flexibilidad y adaptabilidad Para los líderes que provienen del modelo de trabajo presencial, este es uno de los puntos más difíciles de asumir, ya que la atención tradicionalmente estaba puesta en métricas como “horas trabajadas”. En el nuevo paradigma de trabajo remoto, es crucial centrarse en la efectividad y los resultados. Los líderes deben confiar en que los empleados gestionarán su tiempo de manera eficiente y cumplirán con los objetivos establecidos. Esto implica medir el desempeño basado en la calidad y el impacto del trabajo, en lugar del tiempo invertido, promoviendo la autonomía y la responsabilidad individual. Además, es esencial adaptar la gestión a diferentes zonas horarias y utilizar herramientas que faciliten la colaboración asíncrona, fomentando así un entorno flexible y productivo que valora el bienestar y la innovación del equipo.
El liderazgo de equipos remotos ofrece una serie de desafíos por lo que requiere un enfoque adaptativo y centrado en la comunicación, la flexibilidad y el uso de herramientas adecuadas.
Al establecer una comunicación clara y constante, fomentar la responsabilidad mediante la fijación de objetivos claros, proporcionar las herramientas necesarias y adaptarse a nuevas formas de medir el desempeño, los líderes pueden maximizar la productividad y el compromiso de sus equipos remotos. Además, la flexibilidad y la adaptabilidad son fundamentales para enfrentar los desafíos del trabajo remoto y aprovechar las oportunidades que ofrece.
Implementando estas prácticas, no solo se mejora la eficiencia operativa, sino que también se crea un entorno de trabajo más inclusivo y motivador, alineado con las tendencias actuales del mercado laboral. En este mundo digital en constante evolución, la capacidad de liderar eficazmente a distancia se convierte en una ventaja competitiva crucial para cualquier organización.
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